lunes, 7 de enero de 2008

La LISI y la Sociedad de la Desinformación

La vida en una sociedad tan "avanzada" y "democrática" como la nuestra es tremendamente cómoda. Durante muchísimos años, nuestros padres y los padres de nuestros padres tuvieron que sufrir mucho para obtener lo que ahora tenemos, incluso sacrificaron sus vidas... y lo vamos a perder: nuestros derechos.

Ya ha comenzado. Volvemos a las etapas más oscuras de la censura y del control. Orwell, simplemente, se equivocó de fecha en su famosa obra de 1984. Gracias a la guerra contra el terror y otros males de esta sociedad como la pederastia, estamos viendo como nuestros derechos se ven reducidos poco a poco, y en esta comoda sociedad nadie se levanta de su cómodo sillón. Nos están quitando nuestros derechos mientras la gente mira el Gran Hermano.

Por un lado nos meten el famoso canon, así protestamos y protestamos y nos distraen de su verdadero objetivo: la censura digital. No nos damos cuenta de que lo del canon ha sido únicamente la vaselina para que no nos dieramos cuenta del enorme falo que nos meten por nuestras flácidas posaderas. Pues la infame LISI, que es la nueva Ley de Medidas de Impulso de la Sociedad de la Información, aparte del canon también incluye un regalo oculto: cualquier organismo competente puede cerrar la web que le plazca. Y un organismo competente puede ser un juez (que sería lo correcto), un político (uhm...), un alcalde (vamos mal...), un simple funcionario (¡horror, la libertad de expresión en manos de funcionarios!) e, incluso, una sociedad privada como la SGAE.

Los periódicos, las emisoras de radio, la televisión son medios de comunicación que ya controlan, los que no son de un partido son del otro, pero Internet no. Internet no es de nadie y no pueden controlarla, pero lo están intentando. Así que, la próxima vez que escribas en un blog criticándoles, y llegues a tener la suficiente influencia mediática, cualquier politicucho de turno podrá cerrártela por cualquier pretesto. O incluso, si tu negocio via internet le hace la competencia al primo de un avispado funcionaro... bueno, te la cierra una temporadita hasta que se aclare el asunto, después unas disculpas, que fue un simple error y, ¡ala!, miles de euros en pérdidas por haber estado desconectado una semana, dos, un mes, bueno... ya sabemos cómo es la justicia de lenta... cuando quiere, mientras el enchufado del funcionario se posiciona en Internet.... Buff... por no hablar de las páginas que cerrará la SGAE por precaución, no vaya a ser que se hagan pupas sus amados autores.

¡Pobres infelices, que creen que nos harán callar!

No hay comentarios: